Un gran avance en la cirugía del Parkinson

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Una técnica novedosa, más cómoda para el paciente y el cirujano, ha desarrollado la tecnología médica para implantar electrodos que estimulen profundamente el cerebro, en el tratamiento quirúrgico de la enfermedad de Parkinson.

“La llamada Estimulación Profunda del Cerebro o DBS [Deep Brain Stimulation] se venía haciendo de manera muy incómoda para el paciente, al cual había que atornillar en la cabeza un marco que lo inmovilizaba. Por medio de ese marco llamado estereotáctico, se podía saber el lugar exacto donde era necesario implantar los electrodos. Pero si el paciente tenía que moverse por alguna razón, por ejemplo porque le diera nausea, podía darse el caso de que hubiera que retirarle el marco, y el procedimiento completo podía echarse a perder, teniéndolo que suspender”, dice el Dr. Pablo Acebal, Neurocirujano afiliado al Kendall Regional Medical Center de Miami. “Ahora hay una nueva tecnología que nos permite encontrar ese lugar exacto del cerebro sin necesidad del marco. Todo se hace a través de pequeños marcadores e instrumentos que se ponen sobre la incisión del cráneo por la cual se introduce el electrodo. El paciente puede mover la cabeza y los instrumentos se mueven con él. Es una tecnología mucho más flexible”.
 Una vez colocado el electrodo, se conecta a un una especie de marcapasos que se implanta debajo de la clavícula. Después, tal dispositivo es graduado externamente por el neurólogo en el consultorio, para que transmita impulsos eléctricos a las células cerebrales donde se origina la enfermedad.

La nueva tecnología sin marco (frameless) se llama Activa DBS. Según sus fabricantes (Medtronic), es un tratamiento quirúrgico que ha probado reducir algunos de los síntomas asociados con la enfermedad de Parkinson. En una de los principales estudios, Activa DBS demostró incrementar los períodos de buena movilidad (no síntomas de movimientos involuntarios excesivos) del 27 al 74 por ciento del día activo del paciente. En otro estudio, Activa DBS mantuvo el mejoramiento de los síntomas motores inclusive después de cinco años. Los síntomas que Activa DBS ha demostrado reducir incluyen: Rigidez –endurecimiento o inflexibilidad de las extremidades o articulaciones; Bradikinesia/akinesia –lentitud/ausencia de movimiento; y Tremor –temblores rítmicos involuntarios de una extremidad, la cabeza o todo el cuerpo.

 

El DBS permite disminuir la cantidad de medicamento y sus efectos secundarios, que pueden ser severos.

El doctor Acebal advierte que la operación no es apta para todo el que padece Parkinson. “No son candidatos quienes tienen un desorden psiquiátrico, quien esté en anticoagulantes, quien tiene la presión descontrolada o está en múltiples medicinas, ni el paciente que esté en el último grado de Parkinson. El paciente tiene que estar todavía en un estado en que responda positivamente a los medicamentos”, dice.

La cirugía para el Parkinson solía hacerse para destruir ciertas células del cerebro. La estimulación profunda de las células cerebrales se hace ahora para afectarlas positivamente. 

La Fundación Nacional del Parkinson, en los Estados Unidos, dice que esta enfermedad ocurre cuando ciertas células (neuronas) en una parte del cerebro llamada sustancia negra mueren o se dañan. Normalmente, estas células producen un químico vital conocido como dopamina. La dopamina permite que los músculos y el movimiento del cuerpo tengan una función suave y coordinada. Cuando aproximadamente un 80 por ciento de las células productoras de dopamina se dañan, los síntomas de la enfermedad de Parkinson aparecen.

La pérdida de las células productoras de dopamina conduce a un patrón de actividad excesiva y anormal. Darle ritmo por medio de impulsos eléctricos constantes y frecuentes corrige esta actividad excesiva y anormal. El DBS no actúa directamente en las células productoras de dopamina, y no afecta los niveles de dopamina del cerebro. En cambio, compensa uno de los principales efectos secundarios de la pérdida de dopamina: un patrón de descarga eléctrica excesiva y anormal. El mecanismo a través del cual los impulsos frecuentes y constantes afectan las células cercanas no ha sido determinado.
Según la Fundación, esta enfermedad afecta tanto a hombres como a mujeres en cifras casi iguales. No discrimina entre fronteras sociales, étnicas o geográficas. En los Estados Unidos, se estima que 60,000 casos nuevos se diagnostican cada año, los cuales pasan a integrar la cifra de 1.5 millones de estadounidenses que actualmente tienen la Parkinson. Aunque esta enfermedad usualmente se desarrolla después de los 65 años, el 15 por ciento de quienes se diagnostican tienen menos de 50 años. 

SINTOMAS DE PARKINSON

La misma Fundación Nacional del Parkinson explica que la pérdida de producción de dopamina en el cerebro causa los síntomas primarios de Parkinson. Los signos claves de la enfermedad de Parkinson son:

  • Tremor (temblor)
  • Lentitud de movimiento
  • Rigidez (endurecimiento)
  • Dificultad con el balance
Otros signos de enfermedad de Parkinson pueden incluir:
  • Escritura pequeña y apretada
  • Expresión facial dura
  • Caminar vacilante
  • Hablar apagadamente
  • Depresión
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Una técnica novedosa, más cómoda para el paciente y el cirujano, ha desarrollado la tecnología médica para implantar electrodos que estimulen profundamente el cerebro, en el tratamiento quirúrgico de la enfermedad de Parkinson.

“La llamada Estimulación Profunda del Cerebro o DBS [Deep Brain Stimulation] se venía haciendo de manera muy incómoda para el paciente, al cual había que atornillar en la cabeza un marco que lo inmovilizaba. Por medio de ese marco llamado estereotáctico, se podía saber el lugar exacto donde era necesario implantar los electrodos. Pero si el paciente tenía que moverse por alguna razón, por ejemplo porque le diera nausea, podía darse el caso de que hubiera que retirarle el marco, y el procedimiento completo podía echarse a perder, teniéndolo que suspender”, dice el Dr. Pablo Acebal, Neurocirujano afiliado al Kendall Regional Medical Center de Miami. “Ahora hay una nueva tecnología que nos permite encontrar ese lugar exacto del cerebro sin necesidad del marco. Todo se hace a través de pequeños marcadores e instrumentos que se ponen sobre la incisión del cráneo por la cual se introduce el electrodo. El paciente puede mover la cabeza y los instrumentos se mueven con él. Es una tecnología mucho más flexible”.
 Una vez colocado el electrodo, se conecta a un una especie de marcapasos que se implanta debajo de la clavícula. Después, tal dispositivo es graduado externamente por el neurólogo en el consultorio, para que transmita impulsos eléctricos a las células cerebrales donde se origina la enfermedad.

La nueva tecnología sin marco (frameless) se llama Activa DBS. Según sus fabricantes (Medtronic), es un tratamiento quirúrgico que ha probado reducir algunos de los síntomas asociados con la enfermedad de Parkinson. En una de los principales estudios, Activa DBS demostró incrementar los períodos de buena movilidad (no síntomas de movimientos involuntarios excesivos) del 27 al 74 por ciento del día activo del paciente. En otro estudio, Activa DBS mantuvo el mejoramiento de los síntomas motores inclusive después de cinco años. Los síntomas que Activa DBS ha demostrado reducir incluyen: Rigidez –endurecimiento o inflexibilidad de las extremidades o articulaciones; Bradikinesia/akinesia –lentitud/ausencia de movimiento; y Tremor –temblores rítmicos involuntarios de una extremidad, la cabeza o todo el cuerpo.

 

El DBS permite disminuir la cantidad de medicamento y sus efectos secundarios, que pueden ser severos.

El doctor Acebal advierte que la operación no es apta para todo el que padece Parkinson. “No son candidatos quienes tienen un desorden psiquiátrico, quien esté en anticoagulantes, quien tiene la presión descontrolada o está en múltiples medicinas, ni el paciente que esté en el último grado de Parkinson. El paciente tiene que estar todavía en un estado en que responda positivamente a los medicamentos”, dice.

La cirugía para el Parkinson solía hacerse para destruir ciertas células del cerebro. La estimulación profunda de las células cerebrales se hace ahora para afectarlas positivamente. 

La Fundación Nacional del Parkinson, en los Estados Unidos, dice que esta enfermedad ocurre cuando ciertas células (neuronas) en una parte del cerebro llamada sustancia negra mueren o se dañan. Normalmente, estas células producen un químico vital conocido como dopamina. La dopamina permite que los músculos y el movimiento del cuerpo tengan una función suave y coordinada. Cuando aproximadamente un 80 por ciento de las células productoras de dopamina se dañan, los síntomas de la enfermedad de Parkinson aparecen.

La pérdida de las células productoras de dopamina conduce a un patrón de actividad excesiva y anormal. Darle ritmo por medio de impulsos eléctricos constantes y frecuentes corrige esta actividad excesiva y anormal. El DBS no actúa directamente en las células productoras de dopamina, y no afecta los niveles de dopamina del cerebro. En cambio, compensa uno de los principales efectos secundarios de la pérdida de dopamina: un patrón de descarga eléctrica excesiva y anormal. El mecanismo a través del cual los impulsos frecuentes y constantes afectan las células cercanas no ha sido determinado.
Según la Fundación, esta enfermedad afecta tanto a hombres como a mujeres en cifras casi iguales. No discrimina entre fronteras sociales, étnicas o geográficas. En los Estados Unidos, se estima que 60,000 casos nuevos se diagnostican cada año, los cuales pasan a integrar la cifra de 1.5 millones de estadounidenses que actualmente tienen la Parkinson. Aunque esta enfermedad usualmente se desarrolla después de los 65 años, el 15 por ciento de quienes se diagnostican tienen menos de 50 años. 

SINTOMAS DE PARKINSON

La misma Fundación Nacional del Parkinson explica que la pérdida de producción de dopamina en el cerebro causa los síntomas primarios de Parkinson. Los signos claves de la enfermedad de Parkinson son:

  • Tremor (temblor)
  • Lentitud de movimiento
  • Rigidez (endurecimiento)
  • Dificultad con el balance
Otros signos de enfermedad de Parkinson pueden incluir:
  • Escritura pequeña y apretada
  • Expresión facial dura
  • Caminar vacilante
  • Hablar apagadamente
  • Depresión