Contracturas en la espalda

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Muchas veces escuchamos hablar de las contracturas. Sin embargo pocas veces estamos realmente conscientes de que son, como funcionan y cuál es la importancia de tratarlas.

Las contracturas son mucho más comunes de lo que creemos. La salud de nuestros músculos se puede ver constantemente afectada si no somos conscientes de cuidar nuestra postura y el esfuerzo que hacemos al hacer deporte o cualquier otra actividad que lo requiera.

¿Que es una contractura?

Una contractura, así como su nombre lo indica, es una contracción del músculo (y sus fibras) de manera continuada e involuntaria que provoca tensión en la parte del cuerpo en la que se desarrolla.

Al suceder, impide que la sangre llegue con normalidad a las células musculares y se acumulen toxinas. Por ello los músculos envían señales al cerebro que finalmente es lo que produce el dolor.

Sin embargo, si el dolor persiste es recomendable que visite a su terapeuta. Las contracturas se tratan con miorrelajantes, antiinflamatorios, termoterapia, masajes e hidroterapia principalmente.

Nosotros nos preocupamos por la causa desencadenante de la contractura, para tratar el problema de raíz. Si usted sufre de este tipo de problemas, no dude en contactarnos.

Tipos de contracturas

  • Durante el esfuerzo: Estas contracturas ocurren cuando hay acumulación de desechos metabólicos dentro de la fibra muscular. Al ejecutar movimientos bruscos, fuera de la rutina, por ello antes de ejercitar es importante el calentamiento previo.

  • Después del esfuerzo: En este caso las contracturas ocurren por el estiramiento de la fibra y/o su trabajo excesivo que hizo en el esfuerzo, lo cual le produce lesiones y dolor.

Causas principales

  • Deporte: Recargar los músculos en exceso, puede resultar en contracturas. Por lo general esta es la causa principal asociada a sufrir contracturas, sin embargo cualquier persona, independientemente de su rutina diaria, puede ser susceptible a sufrir de este fenómeno.

  • Sedentarismo: Cuando se hacen esfuerzos fuera de lo común, es más probable sufrir de contracturas. Es importante mantenerse activo para entrenar a nuestros músculos y prolongar su elasticidad y fuerza.

  • Deshidratación: la falta de agua y otros componentes como el potasio o la glucosa, pueden provocar irritación en el músculo y facilitar la aparición de contracturas. Mantener una dieta balanceada es fundamental para estar saludables.

  • Envejecimiento: Con la edad, nuestros músculos van perdiendo elasticidad y fuerza; debido a ello cualquier esfuerzo puede ser excesivo y desarrollar una contractura. Para ello es fundamental mantenerse activo, haciendo al menos 30 minutos de actividad física diaria y estiramientos.

Si usted sufre constantemente de este tipo de problemas, es recomendable que realice cambios de postura a lo largo del día, especialmente si pasa muchas horas sentado o de pie. También realizar estiramientos de unos 3 minutos aproximadamente, cada dos horas,  beber agua con regularidad y seguir una dieta balanceada.

Le dejamos algunos artículos relacionados que le pueden interesar si sufre de este tipo de malestares por su trabajo o estilo de vida.

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Muchas veces escuchamos hablar de las contracturas. Sin embargo pocas veces estamos realmente conscientes de que son, como funcionan y cuál es la importancia de tratarlas.

Las contracturas son mucho más comunes de lo que creemos. La salud de nuestros músculos se puede ver constantemente afectada si no somos conscientes de cuidar nuestra postura y el esfuerzo que hacemos al hacer deporte o cualquier otra actividad que lo requiera.

¿Que es una contractura?

Una contractura, así como su nombre lo indica, es una contracción del músculo (y sus fibras) de manera continuada e involuntaria que provoca tensión en la parte del cuerpo en la que se desarrolla.

Al suceder, impide que la sangre llegue con normalidad a las células musculares y se acumulen toxinas. Por ello los músculos envían señales al cerebro que finalmente es lo que produce el dolor.

Sin embargo, si el dolor persiste es recomendable que visite a su terapeuta. Las contracturas se tratan con miorrelajantes, antiinflamatorios, termoterapia, masajes e hidroterapia principalmente.

Nosotros nos preocupamos por la causa desencadenante de la contractura, para tratar el problema de raíz. Si usted sufre de este tipo de problemas, no dude en contactarnos.

Tipos de contracturas

  • Durante el esfuerzo: Estas contracturas ocurren cuando hay acumulación de desechos metabólicos dentro de la fibra muscular. Al ejecutar movimientos bruscos, fuera de la rutina, por ello antes de ejercitar es importante el calentamiento previo.

  • Después del esfuerzo: En este caso las contracturas ocurren por el estiramiento de la fibra y/o su trabajo excesivo que hizo en el esfuerzo, lo cual le produce lesiones y dolor.

Causas principales

  • Deporte: Recargar los músculos en exceso, puede resultar en contracturas. Por lo general esta es la causa principal asociada a sufrir contracturas, sin embargo cualquier persona, independientemente de su rutina diaria, puede ser susceptible a sufrir de este fenómeno.

  • Sedentarismo: Cuando se hacen esfuerzos fuera de lo común, es más probable sufrir de contracturas. Es importante mantenerse activo para entrenar a nuestros músculos y prolongar su elasticidad y fuerza.

  • Deshidratación: la falta de agua y otros componentes como el potasio o la glucosa, pueden provocar irritación en el músculo y facilitar la aparición de contracturas. Mantener una dieta balanceada es fundamental para estar saludables.

  • Envejecimiento: Con la edad, nuestros músculos van perdiendo elasticidad y fuerza; debido a ello cualquier esfuerzo puede ser excesivo y desarrollar una contractura. Para ello es fundamental mantenerse activo, haciendo al menos 30 minutos de actividad física diaria y estiramientos.

Si usted sufre constantemente de este tipo de problemas, es recomendable que realice cambios de postura a lo largo del día, especialmente si pasa muchas horas sentado o de pie. También realizar estiramientos de unos 3 minutos aproximadamente, cada dos horas,  beber agua con regularidad y seguir una dieta balanceada.

Le dejamos algunos artículos relacionados que le pueden interesar si sufre de este tipo de malestares por su trabajo o estilo de vida.

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